jueves, 25 de abril de 2013

el calentamiento global


EL CALENTAMIENTO GLOBAL 


En palabras del autor este libro persigue dos objetivos. 
En primer lugar, “ayudar al lector a entender cómo 
llegamos al atolladero del cambio climático en el que 
nos encontramos actualmente” de lo cual destacaremos la cooperación entre disciplinas científicas en la 
búsqueda de respuestas de consensos, algo que no 
es habitual en los científicos. El segundo objetivo es 
“describir la compleja relación entre ciencia, política 
y sociedad”en relación al cambio climático , del cual 
destacaremos la particular conexión entre científicos 
y ciudadanía para convencer a los actores políticos a 
tomar medidas ahora, por resultados que empezarán 
a verse en 20 a 30 años en adelante. Algo muy poco 
habitual en los políticos.
Con respecto al primer objetivo, el autor sostiene 
que las investigaciones sobre el cambio climático no 
siguen la concepción habitual de una investigación 
científica tradicional tras resultados definitivos, tomando distancia de su eventual aplicación. En cambio, el 
descubrimiento del calentamiento global ha sido conducido por científicos dispersos que espontáneamente 
establecen contacto interdisciplinario, en un esfuerzo 
por entender la complejidad de los fenómenos del 
cambio climático. En el entendido que los resultados 
nunca serán definitivos y siempre están orientados a 
su aplicación. “El sistema climático de la tierra es una 
complicación tan poco simplificable que nunca lo enComentario
El Calentamiento Global
Spencer Weart
tenderemos por completo como podemos entender 
la ley física” , plantea el autor.
La cooperación entre científicos de diferentes ciencias 
naturales ha surgido espontáneamente por la complejidad del tema. A modo de ejemplo, el autor recurre a 
dos casos de cooperación interdisciplinaria. El caso de 
Mario Molina, hoy premio Nóbel de Química, que de 
una investigación sobre contaminación atmosférica por 
aviones supersónicos, derivó en dos descubrimientos 
sucesivos con participación de otros dos científicos. 
Un gas aparentemente inocuo, el cloro fluoro carbono, destruye la capa de ozono con graves efectos en 
seres humanos, animales y en vegetales; y, además, es 
un gas con efecto de invernadero “por su prodigiosa 
absorción de radiación infrarroja”. El otro ejemplo 
del autor fue la integración de los modelos oceánicos 
con los atmosféricos. Tal como se previó, los océanos, 
al conservar calor retrasarían el calentamiento global 
durante varias décadas. El optimismo se mantuvo por 
diez años. Gracias a la cooperación de geólogos y para 
sorpresa de todos, se descubrieron grandes saltos en 
temperatura y a la vez concentración del CO2 ocurridos en todo el mundo hace cientos de miles de años. 
“Una tendencia lenta sostenida durante largo tiempo 
puede desencadenarse en un salto de proporciones” 
en un tiempo futuro que solo podemos medir una 
vez ocurrido.